viernes, 24 de abril de 2020

DIBUJO INFANTIL DURANTE EL CONFINAMIENTO



!Hola¡ muy buenas queridos lectores y lectoras, ¿que tal estáis llevando el confinamiento? ¿y los más peques? ¿cómo lo llevan? espero que bien.Ya llevamos tantos días de confinamiento que ni sé cuantos son, y poco a poco uno se empieza a plantear cómo acabará está situación y en que rango de cantidad nos afectará en el futuro.Aun así toca esperar a que esto acabe y nuestro grandes héroes que son los trabajadores y trabajadoras que siguen esforzándose para que el país no se derrumbe del todo consigan vencer al "bicho".Pero ¿que hace el resto de ciudadanos/as?, pues desde nuestro pequeño rango, apoyarlos como podamos, ya sea creando mascarillas, haciendo conciertos a través de redes sociales para hacer la etapa más amena, dando mensajes de apoyo,donando para que los sanitario dispongan de más material, aplaudiéndoles todos los días a las ocho, y muchas otras cosas que ahora no se me ocurren,pero hay una que e ha llamado la atención enormemente... dibujar, si dibujar, algo que hoy en día está un poco olvidado pero que útil es.

Según lo que yo sé hay, algunas personas,niños y niñas sobretodo que a esos trabajadores les hacen dibujos, es su manera de agradecerles el esfuerzo que hacen, cosa que me llevó a pensar en cómo serían aquellos dibujos.Es por esta pregunta por lo que decidí crear este apartado hablando sobre el dibujo infantil durante el periodo de cuarentena.Resulta realmente interesante las cosas que he conseguido, porque si te paras a pensar,el dibujo es una forma de expresión para cualquier persona, y en especial en niños y niñas, ya que con ellas los y las peques se expresan y muestran al mundo cómo están viviendo una situación o lo que sienten en algunos momentos.

Es por esto por lo que decidí pedir a mi hermana que me enviara dibujos de mi sobrino y mi sobrina que hayan hecho durante todo esta periodo, y, si soy sincero hay cositas muy interesantes y curiosas, aquí os dejaré unas pequeñas muestras del pequeño arte de ambos: 





Este dibujo fue creado por mi sobrina de 6 años, es muy bonito ¿no creéis? a mi sin duda me encanta.




Este es otro dibujo que realizó la peque de 6 años esta muy chulo sin duda.



Y este último lo hizo mi sobrino de 4 años que está a punto de cumplir los 5 ¿qué os transmite? a mi me parece increíble.























Estos dos últimos los hizo la peque de 6 años, que sin duda se la ve que le encanta dibujar.

Mass dibujoss realizadoss en confinamiento por niñoss y niñassde dissstintass edades.

Primero oss ensseñarśe dibujos hsechoss por mi primo y mi hemano que tienen 5 añosrsecien cumplidos. A pesar de haber ssido realizado por niños difserentes tienen mucho en comun  la hora de dibujar personas, aunque se puede comprobar ques uno ess masss detallisst a la hora de dibujar por ejemplo al sibujar la mariposa.





Por otro lado estan los dibujos hechos por mi primo de 7 años. Si comparamos las personas dibujadas arriba destaca que los dibujos sson mucho más detallados con siete años y  prestan mas atención a la ropa pudiendo observar como se ven los estereotipos visstiendo a las niñas con falda o vestido y el niños  pantalones, o también en los coloress utilizados para la ropa.



Y por ultimo los dibujos de mi hermana de 9 años. Lo que destaca principalmente   de estos dibujos es que empiezan a poder hacer sibujoss máss absstractoss y utilizansdo difserentes modos de pintar.





¿Qué os inspiran? si queréis podéis comentarlo con total libertad.

domingo, 19 de abril de 2020

EXPERIENCIAS EN TIEMPOS DE CONFINAMIENTO

Hace unos días, una profesora de la universidad nos preguntaba sobre nuestro estado de ánimo, cómo estábamos llevando los días, que hacíamos, cómo aprovechábamos el tiempo, cómo estaban nuestras familias, en fin, todas esas preguntas que son "típicas" en estos días de cuarentena.



Hoy abro esta nueva entrada...


Testimonio de Marta Hernández,

Saber que el final está cerca y que pronto podré abrazar a mis familiares, amigos y amigas, es una de las razones que me hace seguir, no parar ni un instante y valorar todo lo que día a día me está aportando el confinamiento. 

Hoy, domingo, se cumplen 36 días desde que permanezco sola en mi casa. Nunca antes había vivido está experiencia, ni tampoco había imaginado estar tanto tiempo sin tener contacto  físico con mi gente, eso sí, cada tarde, salgo a mi terraza y voy conociendo a mis vecinos y vecinas , que por cierto, son maravillosos.

Esta experiencia me la marqué yo, pues después de haber trabajado con personas que dieron positivo en Coronavirusvirus, no podía ser hipócrita y marcharme a pasar el confinamiento con mi familia, era una actitud egoísta y muy irresponsable. Por eso decidí cumplir todas las indicaciones y me quedé en Madrid.

Día a día sigo las noticias, no he parado de pensar y aunque muchas veces es realmente difícil levantarme de la cama, lo hago por ellos y ellas, todas las personas que luchan día a día para que esta pesadilla acabe más pronto que tarde.

Mientras tanto, toda mi familia permanece en Soria, mi querida Soria. Si habéis visto las noticias, la más desfavorecidas y con más casos de fallecimientos debido a este virus. La población envejecida y la falta de recursos han hecho que todo llegue mucho más tarde que al resto de comunidades. Aún así, Soria tiene los mejores habitantes. No os imagináis la de donaciones económicas particulares que han hecho todos sus vecinos y vecinas, también de material sanitario y otros enseres de primera necesidad que habían desaparecido de los hospitales... Me siento tan orgullosa de ello...

Estoy aprendiendo a hacer mascarillas, mi madre es una auténtica artista. Desde que empezó todo el calvario se propuso ayudar desde su silla de costura, y no ha parado ni un día. Está trabajando de forma voluntaria con empresas para hacer estas creaciones, con el fin de que todos los sanitarios, sanitarias y personas de alto riesgo tenga cuanto antes protección. Además, cuando tiene un ratito, confecciona mascarillas para toda la familia. No sabéis  el gusto que tiene y la ilusión que me hace poder aprender de ella...


Durante este mes, he tenido la oportunidad de  investigar  muchas cosas que antes por falta de tiempo, ni siquiera pensaba, entre ellas: recetas de cocina, el mundo del Yoga, hacer ejercicio en casa, dibujar, escribir y reutilizar materiales para hacer manualidades.

Destaco el mundo del Yoga, pues llevo investigando desde hace 15 días, y no puedo estar más satisfecha con mis avances. Hasta ahora, había sido una práctica imposible para mí; demasiada tranquilidad, silencio, incluso aburrimiento, pero ahora, es parte de mi rutina de ejercicios diarios. Espero poder ir adquiriendo materia para hacer un buen uso de esta práctica y no olvidarme de todo lo que me está aportando cuando todo esto acabe.

 La cocina también ha tomado mucha importancia en mi vida, estoy conociendo nuevos sabores y texturas. Hago recetas de todo tipo, dulces, saladas, pero...no me baso en recetas predeterminadas, intento reinventarme. 
Hoy, hice un Brownie con patata, cacao puro, anacardos y azúcar de panela; me ha encantado su sabor, por cierto.


Todas mis creaciones intento compartirlas con mis amigas, ellas también hacen nuevas recetas e intentamos intercambiarlas para conocer nuestra imaginación.

Como comentaba anteriormente, el dibujo tiene una parte muy importante en mis ratitos libres del confinamiento. Es una vía de escape que me ayuda a relajarme y pensar solo en el diseño y su elaboración, me hace sentir en paz conmigo misma y me ayuda a reconfortarme en los momentos de bajón.

Este dibujo lo hice pensando en todos los niños y niñas que se están haciendo héroe de si mismos. Olvidados en cierto modo durante estos días, están dando lecciones de vida al resto de la sociedad.

Quiero acabar mi testimonio, pensando nuevamente en todas las personas que viven en mí durante la cuarentena. Las de las  videollamadas a la hora de comer, los despertares con fotos desgastadas por los años (pero con mucho amor), las cervecitas de las 21:00, el bingo a las 15:30 , los juegos picantes  y las tardes de anécdotas... Me siento tan feliz de poder contar con ellos y ellas, que su presencia está todo el tiempo conmigo  y en ningún momento me siento sola.

No dejaré de agradeceros todo lo que hacéis por mí y cuidaros siempre.

"En eso consiste, en cuidar de los demás para cuidar de nosotras mismas".







Testimonio de Andrea Jordán:



Día 34, o 36, o 37…. de confinamiento, si os digo la verdad he perdido la cuenta de cuantos días llevo en casa, solo sé que son varios. Prefiero no pensar en cuanto llevo, si no en lo poco que queda para poder volver a nuestras vidas cotidianas.

Por suerte tengo a mi familia cerca, mis padres y mis hermanos comparten conmigo todas y cada una de las horas que tiene el día; pero aun así anhelo a mis abuelos, en los que pienso a diario, a mis tíos/as, a mis primas/os, a mis amigos, a mi novio, etc. Espero con ansia el día que me dejen reencontrarme con todos ellos, será muy emotivo, lo presiento.

Son días difíciles en los que mi estado de ánimo va cambiando, hay días en los que me encuentro muy bien, motivada, positiva, y otros en los que la ansiedad, la incertidumbre, la pena y el agobio me acechan. Aun así, intento mantenerme distraída, haciendo cosas diversas y manteniendo la mente ocupada.

Me ha dado por hacer deporte, una tarea que estaba pendiente en mi lista de “cosas por hacer”. Dibujar, pintar mándalas, colorear… son algunas de las actividades que repito casi a diario para pasar mis ratos. He dado color a mi ventana, sí, cogí pintura, ceras y pinceles y mi ventana a tomado color, un enorme arcoíris ha nacido de ella, eso y alguna cosa más…





Hay actividades de mi vida cotidiana que no han cambiado, una de ellas es teatro. Todos los sábados a las 11:00 conectamos nuestros ordenadores y desde la distancia nos juntamos. Entre bromas, risas y muestras de cariño repasamos el guion, ese que nuestra directora escribió con tanto cariño y que pronto compartiremos con todos/as los que se acerquen a vernos. 
Tras el Telón (mi grupo de teatro) también me inspira en estos días de confinamiento. En el dibujo de abajo podéis ver a Sauce uno de los personajes de nuestro último musical, interpretado por mi hermana. Este año me estreno yo como actriz, hasta entonces había formado parte del equipo de escenografía, donde he aprendido un montón de cosas.


También disfruto de mi familia y de los ratos que pasamos juntos. Hemos rescatados juegos que hacia tiempo que no jugábamos, hacemos retos, reímos, cocinamos, bailamos, nos hacemos bromas y realizamos obras maestras como esta. 



Son muchas las actividades que compartimos los cinco juntos. Pero sin duda, una que recordaremos siempre serán todos los aplausos de agradecimiento que día a día vamos acumulando. Todas las tardes, cuando nuestros relojes dan las 20:00 salimos a nuestras ventanas y aplaudimos con fuerza por todos aquellos que se están exponiendo y enfrentando a este virus tan de cerca; aplaudimos por los médicos, por los cajeros, por los policías, por los barrenderos, por los bomberos… Sin olvidarnos de todas aquellas personas que se han ido con el virus, a los que también dedicamos nuestro aplauso. Este rato lo disfrutamos y lo aprovechamos mucho, esos 10, 15, 20… minutos que duran nos dan ánimos para seguir con esta lucha.

Durante este tiempo no pueden faltar los ratos de llamadas y videollamadas con aquellos que nos importan, aquellos que sentimos más cerca cuando los vemos a través de nuestras pantallas, aquellos con los que compartimos ratos diferentes y nos hacen del día un día diferente. Gracias por dejarme sentirte cerca, por hacerme llegar que estas bien y por regalarme ese tiempo.

Tenemos que ver el lado bueno de todo lo que nos está pasando, estamos aprendiendo a ser más pacientes, a valorar más a las personas y apreciar más sus trabajos. Estamos dedicando tiempo a aquellas personas que tanto queremos.


Es tiempo de pensar, de agradecer y de apreciar aquello que tenemos. 









Testimonio de Sarah Gomez:


Casi al final de esta cuesta reflexionando en si todos estos días han sido tiempo perdido o de verdad lo he aprovechado.

¿Sabéis cuando queréis hacer muchas cosas, pero al final no tenéis tiempo? ¿Cuándo os preocupáis demasiado por otros temas o personas y no tienes tiempo para ti? Pues así me sentía yo un día normal, sin embargo, con este confinamiento he querido aprovecharlo para invertir tiempo en mí.
Me he hecho muchas mascarillas caseras para la cara, tratamientos para nutrir el pelo ya que siempre me lo plancho y las puntas se resienten. Y hablando del pelo, es el que más está sufriendo esta cuarentena ya que no paro de toquetearlo. Antes de que empezara esto ya me corté el flequillo que en un principio no iba a ser duradero, sin embargo, han pasado casi dos meses y aquí sigo recortándolo cada semana para poder ver. También aproveche a teñirme, y pase mucho miedo porque era la primera vez que lo hacia yo sola pero no me quedo del todo mal.




Por otro lado, siempre digo “mañana hago ejercicio” y nunca llega ese mañana. Gracias a estos días he conseguido hacerme una rutina diaria de ejercicios que hasta el momento solo me he salado dos días. Considero que en estos días al no poder salir y que el movimiento sea escaso es muy importante hacer ejercicio y no pasarte todo el día tumbado o sentado. Además, muchos ahora, con tanto tiempo comen por comer y por aburrimiento…



También he aprovechado el tiempo para estar con mi familia y así aprender unos de otros. Las comidas nos las solemos repartir, unos días la hace mi hermano y mi madre y otros mi padre y yo. He de decir que yo de cocinar se lo que viene siendo entre poco y nada, pero gracias a estos días estoy aprendiendo a cocinar otros platos y a comer un poco mas variado. Por las tardes, depende del día vemos alguna película juntos o jugamos a las cartas y el que pierda hace la cena, aunque a la hora de cenar cada uno lo hace cuando le apetece..  

También hablo con mi abuela a la que le he enseñado hacer video llamadas y cada vez que me ve me dice “que guapa estas”. Me hace mucha ilusión hablar con ella y verla porque ahora está sola y yo sé que eso la distrae.  Mi abuelo el pobre lleva ingresado un mes, pero no por coronavirus. Él dice que esta bien y que le tienen aislado para que no se contagie, que no nos preocupemos que le cuidan bien. Yo pienso que nos dice eso para que estemos tranquilo, pero tiene que estar triste porque está allí solo y aburrido. 

Por último, quiero destacar que también redecoré/redistribuí mi habitación, pues tantos días encerrada en el mismo sitio me saturaba. Así que cambié los muebles de lugar y reordené algunas cosas y muchas otras las tiré. Mi madre dice que tengo síndrome de Diógenes porque tenía todavía apuntes de 4º de la ESO, pero es que nunca se saben cuando te pueden hacer falta..
También encontré las temperas y un mándala a medias. Quise terminarlo, pero no quedo del todo bien al pintarlo con las temperas asique como ya había manchado los pinceles decidí hacer un dibujo sencillo de un paisaje. He de decir que pinto y dibujo fatal en comparación con otras personas, pero considero que tampoco quedó tan mal. 


Y bueno chicos y chicas esto es todo. Espero que os haya gustado y que si os aburrís podéis hacer algo de lo que yo he hecho para distraeros.
No os preocupéis que ya no queda nada #UNDIAMASUNDIAMENOS.

Testimonio Gema Guirao:

¿CÓMO VIVIR UN CONFINAMIENTO?


¿Cómo sería que de un día para otro te dicen que no te puedes salir de casa?... En 22 años que tengo no me hubiera imaginado que iba a vivir esta situación, creo que nadie se lo esperaba, pero ¿que se puede hacer?. Nadie te da un manual de "PAUTAS PARA SOBREVIVIR A UN CONFINAMIENTO" que en esta situación no hubiera venido mal, es una situación en la que tú estado de animo es muy vulnerable. Es cierto, que en mi caso soy una persona que pretende mirar el lado positivo de las cosas pero en esta ocasión no me era posible ya que solo me entraban pensamientos negativos. 

Pero me dije que no podía seguir así, por lo que decidí hacer meditación por lo menos 15 minutos al día como mínimo, además salía a bailar por la ventana con mis vecinos y vecinas. 


 Asimismo para distraer mi mente decidí leer el libro que hizo mella en mí, que me hizo ver las cosas de distinta forma. En este se puede encontrar como ver la realidad de distinta perspectiva, como podemos sobrellevar una situación la cual no nos esperábamos.

Es muy recomendable la verdad que tras la lectura de este libro pude llevar la situación del confinamiento un poco más llevadera, con otro punto de vista, he de decir que no fue inmediato sino que hubo crecimiento de mi madurez a lo largo del confinamiento.


Además a mi familia y a mi nos dio por hacer repostería, nos encanta cocinar y no encontramos mejor manera de amortizar el tiempo, nos pusimos ha hacer rosquillas, torrijas, tortilla de patata... eso sí la única condición es que todos los integrantes de la familia debía poner su granito de arena.


Es verdad que mi confinamiento no ha sido ni el mejor pero tampoco el peor, ha habido días en los cuales mis sentimientos han estado a flor de piel, lo importante es que he aprendido a como gestionarlo. Ha sido una experiencia por un lado fortalecedora para mí y por otra agotadora mentalmente en el sentido de tener la incertidumbre a la hora del día.
Espero que esta situación me sirva como experiencia para un futuro y que no la olvide nunca utilizándola como un aprendizaje.







FOTOGRAFÍA COMO VÍA DE ESCAPE

En la entrada anterior comenté que al inicio de la cuarentena, mi familia decidió reunirse para elaborar una lista de cosas que podríamos hacer durante este confinamiento. Al igual que mi padre dejó de lado la pintura con nuestro nacimiento, mi madre tuvo que guardar en su mesilla de noche su cámara de fotos.

Hace cinco semanas mi madre propuso hacer una exposición de fotografías de cuarentena por algunos grupos de WhatsApp. Ha sido curiosa la sensación de encontrar belleza en cosas que hace dos meses nos resultaban tan cotidianas que pasaban desapercibidas. Aquí dejo mis tres fotos favoritas realizadas por mí junto con su historia:


La foto fue hecha un 15 de marzo en el que el tiempo estaba acorde con mi estado de ánimo. Fue un día de estos que se te atragantan y no hay nada que hagas que pueda levantarte un poco el ánimo. Sentada en mi escritorio me di cuenta de como empleada a llover de nuevo y me quede pasmada contemplando las gotas de lluvia sobre mi ventana. Fue una especie de meditación que dio la vuelta a mi día y me permitió acabarlo con una sonrisa.


Leyendo en mi habitación de pronto empecé a escuchar como la lluvia caía con fuerza sobre el suelo. Bajé a avisar a mi madre porque por la mañana habíamos tenido un debate sobre si era lluvia o granizo. En lo que tardé en bajar comenzaba a parar la lluvia y a salir el sol; y como las dos sabíamos lo que iba a pasar, nos asomamos al patio a ver si salí el arcoíris. Fue un momento muy bonito porque  este se había duplicado. Primeramente vimos uno muy poco delimitado y entre unos árboles, nos dimos cuenta de que asomaba uno perfectamente dibujado. Subimos a verlo desde una ventana y quedamos asombrados por dos minutos por ese fascinante espectáculo de la naturaleza que solo es posible cuando se unen elementos casi contrarios.


Mi madre ama la cocina y hace poco descubrió la panadería. Hace panes de mil formas y sabores con ingredientes saludables y ecológicos para que podamos disfrutar de nuestro sentido del gusto sin dejar a un lado la salud. Uno de los momentos mágicos de la semana es cuando decide hacer un pan y lo mordemos y damos forma entre todos y todas. Lo único malo, es que no nos cunden y tenemos que hacer dos o tres a la semana.


Ruth León

viernes, 17 de abril de 2020

DOMINGO DE CUARENTENA

Mi padre siempre dice que desde que nacieron sus hijas no pinta nada en su casa; y es que hace casi 22 años que tuvo que aparcar su lado más artístico y pintor para ocuparse de las tareas domésticas, así como educativas y de cuidados.

El primer día de confinamiento, decidimos convocar una reunión familiar para hacer un listado de todas las cosas que podíamos aprovechar para hacer durante la cuarentena: ese tipo de cosas que siempre quieres hacer pero nunca tienes tiempo. Todos y todas acordamos que podíamos aprovechar para pintar o para que mi padre nos enseñara hacerlo.

Hace un par de semanas, un antiguo profesor de pintura de mi padre y actual amigo, le mandó un mensaje comunicándole que daría una clase online en unos días. Mi padre nos lo comentó a mi madre, mis primos (vivimos juntos) y a mí por si nos apetecía seguirla con él.

Ese mismo domingo a las 12 de la mañana, estábamos los cinco sentados frente a la televisión con un folio, un lápiz y un borrador. La clase consistía en imitar el retrato de un hombre. Para ser honesta, los dibujos de mi madre, mi prima y yo no se parecían en nada al original; pero pasamos un buen rato intentando conseguirlo y riéndonos de los comentarios que se nos ocurrían.

Sin duda, esta cuarentena me está permitiendo disfrutar de muchas facetas de mi familia que desconocía. Aquí os dejo nuestras obras de arte:



Ruth León





miércoles, 1 de abril de 2020

Sigamos sonriendo, todo saldrá bien..



Lectores y lectoras, ¿cómo están llevando la tercera semana de confinamiento?

Ayer se cumplían 17 días desde que el presidente del gobierno puso a España en estado completo de alarma. Cada vez que lo pensamos, nos parece aún más surrealista la situación; pero hay que adaptarse a las circunstancias y aportar cada uno nuestro granito de arena, que en muchos casos será permanecer en casa y no salir salvo para hacer la compra, ir a la farmacia, trabajar o pasear a las mascotas.

Todos y todas somos conscientes de que el coronavirus va a marcar un antes y un después en la historia no solo de España, si no del mundo entero. Desgraciadamente, está llevándose a muchas personas y jamás vamos a permitirnos el lujo de perdonárselo; pero también es nuestra obligación pararnos a reflexionar sobre todo lo que podemos aprender de él.

Una de las cosas que más nos llama la atención es la cantidad de labores sociales que la gente está ofreciendo a la sociedad sin ningún ánimo de lucro. Todo lo imaginable podría estar dentro de esta lista:

o Confeccionar de forma informal y en casa miles de mascarillas, batas, equipos de respiración, gafas, etc...

o  Hacer compras colectivas en los edificios para intentar salir el menor número de personas a la calle.

Aplausos y más aplausos para animar a todas las personas que velan por la sanidad, el cuidado y respeto de los infectados de este maldito bicho.

o Talleres en las redes y en la tele para los y las más pequeñas.

o Diversas formas de entretenimiento como son los conciertos, las clases virtuales (ya sean de yoga, de full-body o de cardio), los vídeos de risa, los tik tok’s…

o Donaciones desde todas las esquinas de este país, tanto económicas como en forma de material.


No cabe duda que dentro de cada persona que habita en este planeta, hay un huequito para ser solidario, respetuoso, responsable e innumerables otros atributos que calificarían a todas esas personas que están aportando su granito de arena para hacer más fácil este terrible suceso.

El otro día, os presentamos algunas actividades para niños y niñas. Eran los primeros días y no imaginábamos cuánto podría durar este sueño tan largo y que seríamos capaces de aprender durante estas semanas. Hoy, sin olvidarnos de todos esos pequeños terremotos que radian la energía positiva necesaria para salir adelante, queremos proponeros la visualización de un vídeo que a nosotras nos ha hecho reflexionar mucho sobre el tema. Además os dejamos unas plantillas a modo de diario que pueden rellenar los y las más pequeñas.

















Ruth León & Marta Hernández



DIBUJO INFANTIL DURANTE EL CONFINAMIENTO

!Hola¡ muy buenas queridos lectores y lectoras, ¿que tal estáis llevando el confinamiento? ¿y los más peques? ¿cómo lo llevan? espero que ...